La Hacienda Mundaca de ahora es un sitio compuesto de vestigios de una casa grande, pozos, arcos y hermosos jardines, donde el más importante se llama "Vista Alegre", que en su momento fue habitado por el pirata Fermín Antonio Mundaca de Marechaga.
De acuerdo a la historia, Fermín Antonio Mundaca de Marechaga fue un pirata que se refugió en Isla Mujeres en 1860, después de haber adquirido su fortuna con la venta y tráfico de esclavos desde África hacia Cuba, para que trabajaran en los campos de azúcar.
Según se señala, Fermín Mundaca es originario de la zona limítrofe entre España y Francia, la cual se denomina País Vasco, y al parecer en su juventud se dedicó al cultivo de las peras.
Cuenta la historia que una vez refugiado en Isla Mujeres, después de haber enfrentado a la armada británica, en el año de 1858, Fermín Mundaca, pirata y negociante de esclavos, se enamoró de una nativa de la isla, apodada "La Trigueña", y que inspirado en ella construyó una hacienda con pozos, arcos y hermosos jardines, la cual llamó "Vista Alegre".
Dicen que se enamoró de esta chica de 18 años, nativa de Isla Mujeres, de quien se menciona que fue una hermosa mujer de piel dorada por el sol, y que a pesar de que quiso construirle esta hermosa hacienda, su cortejo no tuvo éxito.
La Hacienda Mundaca estaba rodeada de magníficos jardines, y en especial el jardín llamado La Rosa de los Vientos, lleno de exóticas plantas tropicales y con una entrada de puertas y bancas talladas con su nombre.
Dicen que "La Trigueña" se casó con un joven isleño, y mientras daba a este hijo tras hijo, Fermín Mundaca poco a poco se volvió loco.
Mundaca talló puertas y bancas con su nombre en dicha hacienda, y pensando en su muerte, talló su piedra sepulcral, la cual identificó por los símbolos del pirata, la calavera con los huesos cruzados y con la inscripción: "Como tu eres yo fui y como yo soy tu serás".
El pirata Fermín Antonio Mundaca de Marechaga murió en la ciudad de Mérida, donde se dice que aún se encuentra enterrado, mientras que en el cementerio de Isla Mujeres existe su piedra sepulcral, presuntamente vacía.
Estaréis diciendo qué curioso una Isla llamada de Las Mujeres, una Hacienda construida por amor, un Jardín llamado La Rosa de los Vientos y una inscripción que dice: "Como tu eres yo fui y como yo soy tu serás".
Hoy he estado googleando y he llegado a esta Isla la cual me llamó bastante la atención y cuando seguí leyendo y ví esta Hacienda que un pirata enamorado de una bella isleña construye por amor ya me pareció una historia aún más atrayente.
Y cuando leí que le hizo un jardín llamado La Rosa de los Vientos entendí que debía quedarme con esta historia. No había ninguna duda. Es mi jardín, vuestro jardín.
Se que los tiempos no son iguales, para nada, no me imagino a mi chico mandando construir una Hacienda para mí sola, por amor.
Tampoco me imagino a ningún hombre tan enamorado... de los que me rodean entregando esta bella prueba de amor o quizás de locura, porque claro el pirata no fue correspondido y sí, si lo imagino volviéndose loco, tallando y grabando por todos los lugares el nombre de su amada.
El amor es locura, una poquita, no hace falta mucha porque entonces ya no sería amor...sería obsesión y no se debe uno sentir muy bien estando obsesionado con alguien...
Más que nada porque surgen los fantasmas...los celos y ya os digo no debe ser una vida muy plácida quien sufre algo así...
Los celos no deben ser buenos para nadie, ni siquiera entre amigas. No tiene sentido.
Para mí tener celos significa tener inseguridad, no tener confianza en uno mismo.
Creo que sentir algo así es propio de niñas, de niñas pequeñas. Que se enfadan o se mosquean porque una no quiere jugar con la otra, o porque una prefiere jugar con más amigas que sólo con una.
Igual que en el amor, sentir celos por el amado puede convertirse en una obsesión y muchas veces llevar a la separación y a hacerse muchísimo daño, en la amistad es igual.
Y para terminar con esta bellísima historia o triste según se mire, me quedo con la frase que el pirata hizo grabar en una inscripción: "Como tu eres yo fui y como yo soy tu serás".
una pena que este pirata con todo lo que se esforzó por conquistar a su dama se quedara sin ella.Besotes
ResponderEliminarEs lo que tiene el amor no correspondido...
EliminarUn beso enorme
Bueno... era un pirata, aunque pirata enamorado.
ResponderEliminarDespués de los desmanes que hiciera para conseguir su fortuna, la dedicó (o buena parte de ella) a "comprar" a su amada. Quien debía de ser de armas tomar y tenerlo muy claro. Un hurra por ella.
Tras la negativa de aquella mujer, debió escuchar con más frecuencia de la deseada la burla, la chanza de sus vecinos a quienes dedicaría su epitafio, digo yo.
No cabe duda que es una preciosísima historia de amor. Me encantaría conocer la hermosa hacienda y, sobre todo, el jardín de La Rosa de los Vientos. Seguro que encontrarás fotos.
Profe ya echaba de menos tus reflexiones. No está nada mal.
ResponderEliminarTe ha gustado la frase por lo que veo...Como tu eres yo fui y como yo soy, tú serás.
Respecto a los deberes que como buena Profe quieres "ponerme" para esta semana del mes de Agosto, no puedo comprometerme a nada. No se si existen fotos de ese Jardín.
Mucha confianza tienes en mí...