La mayoría de las veces, los defectos que vemos en los demás son nuestros propios defectos.
-“Perdone, señor”,
dijo el tímido estudiante,
- “pero no he sido capaz de descifrar lo que me escribió usted al margen en mi último examen....”
-“Le decía que escriba usted de un modo más legible”, le replicó el profesor.
(Tony de Mello 1931-1987)
Será porque nos es más fácil ver los defectos en los demás que en nosotros mismos...
O a lo mejor es porque no nos gusta mirarnos en el espejo...
O quizás porque si nos miramos, pero lo que vemos lo rechazamos...
Y entonces...
Entonces cuando vemos proyectado en el otro lo que no nos gusta de nosotros, si somos críticos...
Somos críticos con los demás pero más nos valdría ser críticos con nosotros mismos...
Porque si tuviéramos el valor de enfrentarnos a nuestros propios defectos seguro que seríamos menos críticos con los defectos de los demás...
Porque ya se sabe...nadie es perfecto y muchísimo menos nosotros mismos...
Que tengáis un buen miércoles...
Me ha gustado mucho la cita de Tony de Mello y en cuanto a lo demás tienes razón la crítica surge cómo una forma de justificar nuestros propios defectos y así no podremos corregirlos si primero no los aceptamos......Ya es hora de despreocuparnos de los defectos ajenos y de preocuparnos de los nuestros pues tenemos el "saco" cargados de ellos.Besotes
ResponderEliminarEse es el problema Charo en lugar de ocuparnos de lo nuestro, mira que nos gusta entretenernos con lo ajeno. Un lema: vive y deja vivir.
EliminarUn beso enorme
aaayyy corazón, que pocos son los que no se fijan apenas en los defectos ajenos, y sí en cambio ve o reconoce las virtudes de los demás, ven la mota en ojo ajeno, pero no sienten la viga en el suyo como se menciona en un pasaje de la biblia, eso creo que es una enfermedad, habría que auto examinarse,,reconocer se los propios defectos físicos o morales, y aún así jmás se debería poner en entredicho tales taras, es lo mismo que juzgar, los hay que siempre están juzgando o cuestionando actitudes ajenas, pero a ellos que no lo juzguen, algo parecido se dice acerca de éste hábito, no juzgues si no quieres ser juzgado...mas o menos...jejeje, bueno amiga, tu como siempre sentando cátedra en cuanto a moralidad y disciplina, entre otras cosas, buena entrada y edificante, instrtuctiva como suele ser tu estilo....sobre todo mi objetivo es dejarte mi beso, saludo, apretujón y seguir activando éste vínculo de amistad que tenemos...besos cielo, y gracias por tu presencia en mi blog..
ResponderEliminarSiempre me gusta leerte, yo creo que nuestro vínculo de amistad va estando cada día más consolidado. Te visito muy a menudo lo que pasa que ya me conoces, hay veces que no me viene la "inspiración" que le vamos a hacer.
EliminarCon respecto a mis entradas instructivas y educativas. No sé. Hacía mucho que no reflexionaba en voz alta y ya tenía ganas. Así que busqué un "algo" que me motivara y voilà.
Besos y apretujones (me gusta) corazón.
Hola Ana, es difícil saber lo mal que lo hacemos diariamente, por eso criticamos a los demás, nos da miedo ver lo nuestro. Una entrada estupenda. U beso.
ResponderEliminarEs muy difícil ser crítico con uno mismo o tal vez la palabra no es difícil sino valiente, hay que tener valentía para mirarse en el espejo y analizarse a uno mismo. Entonces lo más fácil es criticar a los demás. Claro que quizás criticamos en los demás esos defectos que no queremos admitir que tenemos. Es complicado.
EliminarMiles de besos Lola
Muy buena la cita. Me ha gustado mucho tu reflexión. Lo que no me gusta es reconocer que cuando me caen mal ciertas actitudes ajenas es porque no me son tan ajenas como desearía.
ResponderEliminarUn besote grande, grande para Ana, la mujer sabia.
Ahí estamos Pilar, ese es nuestro gran problema. Vemos perfectamente reflejado en los demás nuestros propios defectos. Con ellos no tenemos problema lo decimos y ya está. Pero claro admitir que nosotros también somos así. Eso ya es otra historia, bien diferente. Pero como todo en esta vida...se consigue poco a poco.
EliminarMiles de besos de los que suenan
tan cierto lo que dices Nos molestan las cosas que vemos en los otros tanto como nos molestan las nuestras
ResponderEliminarLo bueno de esto sería si consiguiéramos hacer cambiar, hay veces que no se puede, pero lo menos controlar esos defectos que tenemos. En nuestra mano o voluntad está.
EliminarBienvenido a mi rinconcito
Un abrazo
Es cierto que a veces es más fácil criticar a los demás que pararnos a pensar si nosotros somos perfectos. Yo siempre he pensado que lo que no quieras para ti no se lo hagas a los demas pero creo que es algo mas facil de decir que de hacer. Un beso,
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo Aida, es muy fácil decirle al otro no me gustas como eres por esto, pero ya admitir o aceptar que yo soy igual que tú, no es fácil, nada fácil. Pero es cuestión de práctica.
EliminarHay una palabra que me gusta muchísimo y yo intento ponerla en práctica siempre. Esta es: Empatía.
Siempre ponerse en el lugar del otro, siempre, para lo bueno pero también para lo malo.
Un beso
Superb post, Ana. I agree. We should do self-examination first before criticizing others. As Michael Jackson's "Man in the Mirror" says, we have to take a look at ourselves first. Thanks for this important reminder.
ResponderEliminarI'm glad you like this post Lea. It´s true, "Man in the Mirror", is very easy to accept the flaws in the other, because we know no one is perfect and thank goodness because it would be very boring. There is a book, Brave New World by Aldous Huxley should read it again
EliminarKisses xxxxx for you Lea
Una buena reflexión cincuentañera...me quedo en tu club para seguir analizando cuestiones como esta.
ResponderEliminarBesos guapa!
Tracy en su entrada de esta mañana invita a sus amig@s virtuales a conocer tu rinconcito. Así que he ido a visitarte. Y la verdad me ha gustado. No he podido quedarme pero ahora ya sí. Me ha llamado la atención el nombre de tu blog: La rebeldía de una cincuentañera. Creo que este puede ser el principio de una amistad virtual.
EliminarUn besazo
En el mundo entero, no hay quien no tenga un “pero”, lo que pasa es que nadie ve su joroba y si lo haces con mala fe, El que se alegra del mal del vecino, el suyo le viene de camino.
ResponderEliminarUn beso.
Me alegro muchísimo Manuel de que por fin me dejes tu opinión. Es verdad no debemos alegrarnos del mal de los demás porque siempre nos vuelve, de una manera o de otra, más pronto o más tarde, pero vuelve. Por eso a mí me gusta mucho decir...quien siembra, recoge.
EliminarUn beso
Me molestan mucho los defectos "ruidosos" de los demás sobre todo cuando descubro que son innatos en mi. Bicos y buen finde.
ResponderEliminarPor fin una valiente!!!!! Muy bien. No es fácil reconocer los defectos, es la primera vez que leo que existen defectos "ruidosos" (ya me lo explicarás Sidrina) pero lo tengo clarísimo yo me siento muchísimo mejor, si procede claro, diciendo mis defectos en voz alta, tampoco es cuestión de asustaros, pero tengo algunos defectos, no muchos pero los tengo, algún día haré una entrada sobre ellos.
EliminarBicos y buen finde también para ti
defectos ruidosos son los que más se notan los que hace ruido jajaja. Bicos
EliminarHasta ahí llego, ruidosos = ruido. Pero no llego a más. jajajaja Bicos
EliminarTienes muchísima razón, y si cada noche nos miramos por dentro, veremos aquello que hemos apreciado en los demás dentro de nosotros mismos. Gran entrada amiga. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
ResponderEliminarhttp://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
Totalmente de acuerdo contigo Pepe, estamos más pendientes de lo malo que de lo bueno. Un abrazo.
EliminarPues a mí siempre me parecen más "gordos" los defectos de los demás que los mios; ¡qué le voy a hacer! Al final va a resultar que tengo una "granja de vigas" en mi ojo, pero, claro, no soy perfecta (ni tampoco aspiro a serlo, ya no).
ResponderEliminarSuele pasar Ratona, los nuestros son "blancos" pero los defectos de los demás son de todos los colores. Perfecta no eres. Pero casi.
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